La estructura confederal de Suiza da lugar a un sistema fiscal de dos niveles: el federal y el cantonal. Además, los municipios también recaudan impuestos, la mayoría de las veces a través de «tasas adicionales» calculadas sobre la base del impuesto cantonal. Por tanto, la carga fiscal de las personas jurídicas difiere considerablemente en función del cantón en el que estén establecidas.

Para simplificar la fiscalidad y limitar las diferencias entre cantones, el gobierno federal adoptó en 1993 una ley federal de armonización de los impuestos directos de los cantones y municipios (LHID). En vigor desde el 1 de enero de 1993, esta ley ha:

  • armonizado los aspectos formales de la fiscalidad, como la obligación, la finalidad del impuesto, los períodos impositivos, etc.
  • mantenido un alto grado de autonomía para los cantones a la hora de fijar las escalas, los tipos y las deducciones.

Esto explica que sigan existiendo grandes disparidades entre los cantones en cuanto a la carga fiscal que finalmente soportan los contribuyentes, tanto empresas como particulares.

¿Qué personas jurídicas tributan?

Solo las personas jurídicas con domicilio social o sede de dirección en Suiza están sujetas a un impuesto suizo ilimitado sobre sus ingresos internacionales, pero respetando los acuerdos de doble imposición con terceros países.

Existen dos categorías de entidades jurídicas que están sujetas a regímenes fiscales diferentes:

  • las sociedades de capital (sociedades anónimas, sociedades comanditarias por acciones, sociedades de responsabilidad limitada) y las sociedades cooperativas
  • las asociaciones, fundaciones y otras personas jurídicas (organismos e instituciones públicas o eclesiásticas, así como inversiones colectivas con propiedad directa de bienes inmuebles).

¿Qué tipo de empresa elegir?

La elección de la forma de la empresa tiene importantes consecuencias para la responsabilidad legal y el patrimonio. Para más información, consulte nuestro artículo sobre la elección de las consecuencias civiles de las distintas formas de empresa.

Fiscalidad de las sociedades de capital

Impuesto sobre la renta: federal y cantonal

Las empresas están sujetas al impuesto sobre la renta a escala federal y cantonal.
Se trata de un impuesto sobre los beneficios netos de los gastos profesionales admisibles y los impuestos directos e indirectos pagados por la empresa durante el periodo impositivo.

  • El tipo impositivo federal es del 8,5 % (art. 68 LIFD).
  • Todos los cantones tienen también un impuesto sobre los beneficios. La mayoría de ellos prevén un tipo fijo que varía considerablemente de un cantón a otro (del 1,5 % en Lucerna al 10 % en Ginebra). Otros fijan el impuesto sobre la base de una tarifa mixta o progresiva, generalmente con un mínimo y un máximo. Este es el caso, sobre todo, de los cantones de Berna, Zug y Friburgo. Además de este impuesto básico, existen las tasas adicionales cantonales y comunales.

Otros impuestos federales

Además del impuesto sobre la renta, el gobierno federal también recauda el impuesto de retención, el impuesto de timbre y el IVA.

Por otro lado, no aplica ningún impuesto sobre el capital.

Impuestos cantonales sobre el capital

A excepción del cantón de Uri, todos los cantones siguen previendo un impuesto sobre el capital de las sociedades de capital. Casi siempre es proporcional y se expresa como un porcentaje del capital imponible.

Como excepción, tres cantones (los cantones de los Grisones, Valais y Ginebra) recaudan un impuesto sobre la base de una tarifa progresiva.

 

Sociedades cooperativas y sociedades de cartera

Las sociedades cooperativas tributan, en principio, según las mismas normas que las sociedades de capital.

Por su parte, las sociedades de cartera tributan sobre la base de normas especiales que las liberan de la imposición sobre sus beneficios tanto a escala federal como cantonal. Por otro lado, el impuesto cantonal sobre el capital sigue siendo exigible, aunque a un tipo generalmente más bajo.

 

Exoneraciones fiscales

Además, todas las leyes cantonales prevén la posibilidad de conceder exenciones fiscales (totales o parciales) o desgravaciones a las empresas de nueva creación que desarrollen una actividad que el cantón desee promover.

Este tipo de ayuda también puede concederse a escala federal. Sin embargo, estas medidas no pueden exceder la desgravación concedida a la empresa por el cantón.

Reflexión esencial sobre la elección del cantón

Dadas las importantes diferencias en los regímenes fiscales de los distintos cantones, los empresarios que deseen crear una empresa en Suiza deben tener especial cuidado al elegir el cantón en el que desean establecerse. En todos los casos, esta elección debe basarse en una ubicación real. Además, como siempre en estas cuestiones, la fiscalidad no debe ser el único criterio, sino uno de los elementos que conviene tener en cuenta en la elección.